River 1 - Rosario Central 0
El goleador de River que despierta ilusión. Federico Andrada |
No tengo dudas en
afirmar que el partido frente a Rosario central, fue el más flojo de local
desde que Ramón Díaz regresó a River. Un espanto el juego de River. Para mí
incluso jugó peor que contra Gimnasia en la primera fecha. Sin ideas, sin
generar fútbol. Casi no tuvo situaciones, y jugó para perder o empatar. Lo
salvó que Rosario Central vino al Monumental sin ningún tipo de ambición.
Si se lee el primer
párrafo alguien puede pensar que River no se llevó los 3 puntos en la pasada
noche viernes. Pero River ganó. Y eso es lo importante. Pero el hincha exige,
River no puede dejar la imagen del viernes pasado. Fue un verdadero desastre.
Ramón y el Monumental tienen una identificación que parece sobrenatural. No
pierde Ramón ahí. Y esa extraña fuerza entre ellos hace que algo pase siempre
bueno para River. Ganó River por un milagro. Se sostiene el invicto de Ramón de
local. Apareció el pibe Andrada y logró el triunfo con un gol de cabeza.
Este equipo se está
armando entre errores e improvisaciones. El primer tiempo River fue muy pobre
como equipo. Lo tuvo que reconocer el mismo Ramón Díaz, poco adepto a la
autocrítica pública. Jugadores en un muy bajo nivel. Especialmente Ponzio,
Mercado, Maidana y Ferreyra. Cuesta entender porque Ferreyra tan rápido se convierte
en titular.
Escaso poder ofensivo,
nula sorpresa para llegar al área. Vangioni estancado en una posición en donde
pierden peso sus virtudes. Lanzini sin un puesto claro en el equipo. Pasó el
primer tiempo y la gente empezó a murmurar.
El segundo tiempo fue
más flojo todavía. Central empezó a soltarse un poco y hasta Barovero salvó a
River. El equipo no aparecía. Todo daba para la desaprobación del hincha.
Exasperaba ese “toqueteo” intrascendente entre los defensores. River debe haber
estado 20 minutos haciendo toques para los costados sin que nadie pudiera ser
punzante con la pelota.
Ramón intentó con los
cambios darle más peso ofensivo al equipo. No lo logró. River ganó en la única
jugada de peligro. Un córner. Saltó y anticipó muy bien Simeone. Y estaba
Andrada para sellar la victoria con otro cabezazo. El goleador histórico de las
inferiores de River comenzó ojalá un tiempo importante en su relación con el
gol.
¿Qué podemos destacar
en esta actuación tan pálida además de los 3 puntos? En primer lugar a
Barovero. Clave en una atajada en el segundo tiempo. Además estuvo muy seguro
de arriba. Buena respuesta ante un equipo que sólo tiro centros. Mejoró Balanta
con respecto al anterior partido. Entró muy bien Ledesma a jugar la última
parte del partido. Y lo que dijimos, el aporte de los pibes. Andrada que
convirtió y Simeone que sigue demostrando que tiene capacidad. Ojalá puedan ser
llevados y acompañados para poder dar el salto definitivo.
Flojo Mercado. Ponzio
mejoró algo en el segundo tiempo. Insinuó Carbonero pero se quedó mucho en el
segundo tiempo.
Párrafo aparte para
Fabbro. Muestra movimientos buenos. Tiene la pelota, busca siempre al compañero
bien ubicado. Ayer no jugó un buen partido. Hay que tenerle paciencia.
Pareciera que será menos que la que se tiene a otros. Inexplicablemente se hizo
expulsar pegando una patada descalificadora. Por ahora es un enigma el jugador
que viene del fútbol paraguayo y por el cual Ramón insistió tanto.
Ganó River, lo único.
Pero lo único enserio. Como se dice siempre, ganar ayuda a trabajar y a
corregir errores. Esto no se soluciona con Teo Gutiérrez y con Mora. Sí se
espera que puedan brindar más variantes en ataque y poder ofensivo. Y que todo
no dependa de los pibes. Hay errores de funcionamiento que hay que solucionar.
Y sobre todo, asumir una realidad: River quizá tiene mejor equipo que el torneo
pasado. Pero tiene un peor plantel. Y es responsabilidad de los dirigentes y
del cuerpo técnico. Ojalá que lo puedan revertir y River salga campeón como su
historia manda. Lo visto el viernes nubla cualquier ilusión.
Se ganó, sólo eso, y
nada más que eso.
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