River 3- Ferro 0. River te hace llorar.

Te hace llorar River. Lloras por lo que ven tus ojos,  por lo mal que juega River por momentos. Y lloras de emoción, porque cuando llega el gol, te desahogas, sacas afuera todo lo que te hace sentir este momento inédito en la vida de River.

Algo de esto, es lo que sentí al ver este River-Ferro. Un equipo enfrente muy limitado. Que su única virtud fue estar firme en defensa. Y despertaba mucha impotencia ver como River no podía hacer absolutamente nada para doblegarlo.

Cuando termina un primer tiempo como el que jugó River, lloras de angustia e impotencia. Lloras porque vez que Díaz no sabe a qué juega. Es muy malo el presente del marcador de punta. Lloras porque no se le cae una idea en ataque. Porque el Chori se empeña en jugar al papi-fútbol y no a un deporte profesional. Lloras cuando vez que Ponzio sin Cirigliano bajó el nivel. Es triste ver que Sánchez y Ocampo deambulan por la cancha como en el primer tiempo. Me preocupa el estado físico de Cavenaghi, lo veo lento y un poco excedido de peso.

Jugó mal todo el equipo en el primer tiempo. Todo mal. Todo muy mal. Te hace mal ver a River así.

Y hasta los 25 minutos del segundo tiempo, todo se repitió. Todo fue igual de horrible. Entendí porque Almeyda duda de Abecasis. Hoy jugó horrible el lateral. Tan mal como para que Vella regrese si se lo permite la lesión. Hasta ese momento, el Chori insinuó poco. Y Cavenaghi aportó casi nada.

A los 30 minutos del segundo tiempo comenzaron los otros llantos. Estuvo bien el técnico de River con los cambios. Y se refuerza con lo que dijo en la conferencia de prensa. Todos están por debajo de River. Y en este partido, Cavenaghi y el Chori estaban para salir. Y sin quejas. Y se la jugó el Pelado. Puso al Keko y puso a Aguirre. Y además a Funes Mori. Y los cambios no sé si aportaron mucho desde el juego, pero el equipo se movió distinto. Villalba abrió la cancha. Aguirre contagia y la salida de los otros delanteros, soltó a 

Trezeguet para los últimos minutos.

Y River terminó goleando. Podemos poner la paciencia como una virtud del equipo, pero no se jugó bien. Un escalón más igual. Primero Ramiro Funes Mori estando atento en el área y después Trezeguet de penal. Sí! A River le dieron un penal!

Y después las otras lagrimas amigo. Las que producen jugadas y jugadores como el tercer gol de River. Golazo de Trezeguet. Un gol de otro partido, de otro torneo, de otro país. Terrible calidad, esos goles que hacen llorar, que te hacen abrazar con el que está al lado. Golazo que reconoce la historia de River. Ya Trezeguet es más que una sorpresa. Es el mejor jugador de River en esta segunda etapa del torneo. Marca la diferencia. Y logró en el partido con Ferro, que las lágrimas por lo mal que juega River, se transformen en lágrimas por el fútbol y la pasión que brotó de ese derechazo lleno de calidad y talento. Salud David!

El mejor fue Trezeguet. No olvidar a Vega que estuvo atento en el área por arriba y salvó una jugada en donde la defensa cometió un error grave. Bien el segundo tiempo de Ramiro Funes Mori. Bien los cambios como dijimos y mejoró Ponzio en el segundo tiempo. Los peores, Díaz, Abecasis y Cavenaghi.

No me pregunten por qué. Pero se cayeron algunas lágrimas. Será porque no pude estar en el Monumental y la tele te tensiona más. Lloré por ver a River jugar tan mal y lloré de desahogo por el gol, y lloré por la pasión y emoción de ver un gol como el de Trezeguet. Me haces llorar River, faltan 11 fechas. Espero que esto termine bien. Y al Pelado Almeyda no se lo toca hinchas de River. Comete errores, pero también acierta. Teniendo personalidad para sacar a quien sea y jugando para ganar.

No estuve yo en River, pero estuvo mi sobrino, mi sangre, con la camiseta en la piel y la pasión de todos. Hasta el domingo amigo, ahí en Vélez, con Atlanta, para seguir creciendo.

Mi sobrino, el gran Enzo, con el manto sagrado y en el Monumental. No estuve yo, pero estuvo El.

River y sus actitudes.

Intentamos evaluar a River a esta altura del torneo. Podemos decir que River tiene un gran rival. No es sólo Instituto, ni Rosario Central, ni Quilmes. Es River mismo. River juega con una presión que nadie tiene. Nadie le juega a los otros equipos como le juegan a River.

Y todo lo que pasa en River, jugada a jugada, minuto a minuto, se analiza con una precisión enorme y poniendo sobre la mesa todos los detalles. River debió ganarle tanto a Quilmes, como a Gimnasia el pasado sábado. Pero no lo hizo, y se despiertan un sinfín de rumores, de comentarios. Todos opinan de cada instante que River juega en el Nacional B.

Y en este camino se ven actitudes. Actitudes que ayudan al momento y otras que no suman. Algunas se vieron en el último partido. Rescatemos la actitud de todo el equipo. River no subestima ningún rival. Almeyda le impregna al equipo mucha actitud. River es un equipo que busca, que no se conforma con empatar. El sábado fue una muestra de eso. Los cambios, que quizá fueron un poco tardíos, fueron claramente para ganar el partido.

En cambio, no construye la actitud del Chori Dominguez. Lo digo primero, para mí, no debe salir del equipo. Hoy River no puede darse el lujo que no juegue el Chori. Pero tiene que estar más atento al juego. No puede perder balones por no ser preciso o jugar con displicencia a veces. Y sobre todo, no puede entrar en todas las discusiones y poner en riesgo su permanencia en el partido. El otro día, un viejo zorro como Goux, casi lo hace reaccionar y ser expulsado temprano en el partido. El Chori debe mejorar actitudes dentro del campo, pero no puede salir de ninguna manera.

La llegada de Trezeguet, ha generado un cambio en el equipo. En la Plata volvió a ser el delantero más importante y casi hace ganar el encuentro. Sin dudas, esta nueva presencia generó algo en Cavenaghi. Los delanteros son egoístas, incluso muchas veces es necesario que lo sean.  Pero hay que tener en cuenta, que acá River tiene que ascender, después estarán los lucimientos personales. Cavenaghi es un crack, quizá será ídolo alguna vez, pero lo que pasa en su cabeza con la llegada de Trezeguet, tiene que canalizarlo para bien. Todos deberán mostrar como actitud sentido de equipo y generosidad.

Se vienen momentos de definición. El equipo deberá estar atento, seguro y con mucha calma. La pelea por el ascenso se va reduciendo a pocos equipos. Pero River siempre juega primero contra River. Los mejores deberán estar siempre. Aguirre es el primer recambio del equipo claramente. Pero no podemos dejar afuera a los mejores. Sí pedirles que tengan actitudes generosas y que piensen en el equipo. River hace tiempo que no tiene jugadores de la categoría del ya famoso “tridente”. Tienen que ser quienes no lleven al ansiado retorno a primera.

Empató en la Plata. Pudo ganarlo, pero para hacerlo, no faltó solamente el gol, sino claridad en el juego y actitudes de equipo grande.

Nos espera el sábado el regreso al monumental. Los dirigentes espero que estén a la altura de las actitudes serias, para que el césped no sea la burla de todo el mundo.